lunes, 30 de octubre de 2017

Siguiendo su camino

Sta Montse telefonista.
Vamos a presentar a modo de  compendio un amplio resumen de cuantas actividades se realizaban en el Sanatorio Marítimo hasta que el Hospital poco a poco fue desapareciendo como tal y fue siendo sustituido por el Nuevo Centro de Educación Espacial para niños discapacitados intelectualmente. Se han construido nuevos departamentos y se han adaptado otros viejos. La Srta.  Montse  está contenta en estos días, se ha colocado una nueva centralita telefónica, que ha sustituido a la anterior ya vetusta y anticuada. Enhorabuena Montse.

En esta Escuela/Hospital el curso no empezaba  en Septiembre o en Octubre como en los demás colegios. Tampoco los niños llegaban  a clase en autocar, ni llevaban uniforme…. No existían Aulas, no había  clases con sus bancos ni tenían mesa del profesor. Los niños asistían a las clases unos días, unas semanas, unos meses quizá y estudiaban, y si es preciso se examinaban, pero aprobasen  o no llegaba el día que se marchaban, con sus carteras repletas de recuerdos de cuando estuvieron, una vez, hace mucho tiempo, dando clases en un colegio de un hospital.  

A las 8 y media de la mañana los niños del hospital después del aseo personal, desayunan, se arregla la Sala y alrededor de las nueve cada niño coge sus libros, la clase va a comenzar. Hemos dicho que los niños estaban todos en sus camas y que los niveles de E.G.B. eran muy diferentes entre ellos. Un solo maestro atendía la clase, que como podemos observar era unitaria. Cuando un nuevo niño ingresaba en el hospital del Marítimo enseguida se enteraba de que aquí hay un “colegio” porque se lo contaban los otros niños, de manera que había ocasiones en que algunos padres, antes de que nos dirigiéramos  a ellos, ya se ponían en contacto con el maestro para informarse y concretar los aspectos de la educación de su hijo. Nuestro Colegio, Sanatorio Marítimo, reunía unas características muy especiales. La estancia de los niños era muy variable, siempre estaba en función de la causa de su hospitalización y por tal motivo resultaba imposible establecer un programa de estudios con relación al tiempo, que iba a permanecer en el Centro. También debemos tener en cuenta, que algunos niños estaban en cama inmóviles y tenían que mantener una determinada posición o con algún aparato  ortopédico, otros niños presentaban problemas psíquicos o algún tipo de parálisis cerebral, que dificultaba la labor normal de aprendizaje y por último había niños con problemas de adaptación debido a su enfermedad, que hacían más difícil la tarea educativa. El año 1983 se promulgó el Decreto sobre Ordenación de la Educación Especial, pero nosotros veníamos funcionando, como colegio dentro del hospital, desde el año 1946. Nuestra tarea en  el colegio siempre ha sido el preocuparnos por el desarrollo de la personalidad del niño, ayudándole a que tome conciencia de su situación y la asuma, como un hecho más en la vida. Siempre  procuré que las clases se desarrollaran en un ambiente distendido pero con un absoluto rigor académico. En general los niños prestaban una gran atención a las explicaciones y me contaban que lo “pasaban muy bien dando la lección”. Siempre procuré que los niños siguieran un ritmo parecido al que llevarían en su clase normal si estuvieran en su colegio. Siempre procuré rodear a los niños de ese ambiente de escuela, de colegio al que estaban acostumbrados, antes de ingresar en el hospital y la verdad es que los niños colaboraron siempre, nunca opusieron resistencia aprovechándose de que están en la cama, aunque para conseguir que todo marchara sobre ruedas de vez en cuando tenía que levantar un poquito la mano y darles un poquito de mimos, consentirles algunas cosillas y a veces quedarme un ratito más con ellos al finalizar las clases de la tarde. Ya dije en otro escrito anterior, que siempre mantenía contacto con los profesores de los colegios de procedencia, con objeto de conocer el punto en el que habían quedado sus conocimientos, las áreas en las que el niño podía tener alguna dificultad y en suma, recabar cualquier dato de interés para mejorar su rendimiento escolar. Siempre procuré que el alumno ingresado utilizara  los mismos textos y realizara ejercicios semejantes a los que estaba acostumbrado a realizar, durante el curso normal. Cuando un niño llegaba al Marítimo sin escolarizar se le orientaba a través de la Asistente Social, Srta. Nieves Escandón para su ubicación en algún centro educativo, una vez dado el alta médica y  abandonado el Sanatorio Marítimo.
En estos años 80, el Sanatorio Marítimo había incorporado dos nuevas Unidades dedicadas específicamente, una a los Trastornos del Lenguaje y la Audición y otra denominada Ortóptica, es decir, rehabilitación del estrabismo. Estas dos unidades eran únicas en la villa de Gijón.
Vayamos por partes: La Unidad dedicada a los Trastornos del Lenguaje y la Audición (Logopedia) pertenecía al nuevo campo de la Educación Especial y estaba atendida por varias profesoras: María del Carmen Torre, Ana Rey, Mª José, Pili, H. Modesto y la Srta. Loli, que era la Coordinadora de este Departamento. Estas profesionales eran contratadas por el propio centro unas y otras eran funcionarias del Ministerio de Educación. En sesiones aproximadas de 30 minutos de duración, enseñaban a los niños a vocalizar, a que fortalecieran  los músculos de los órganos del aparato fono articulatorio y a que hicieran diferentes ejercicios corporales en armonía con el tratamiento, que requería cada caso. Estas profesionales no solamente atendían a los alumnos del Centro sino, también a la población infantil de los colegios públicos de la ciudad de Gijón y su Concejo, esta enseñanza rehabilitadora se impartía a todos los niños, que lo necesitaban. El el horario asignado estaba en función de las necesidades del niño. Se acercaban al Sanatorio Marítimo para recibir el tratamiento necesario. Los  horarios estaban coordinados con los colegios de los niños para tratar de acomodarse a un horario, que beneficiara al niño y no perdieran mucho tiempo; solía ser en el espacio del medio día.  La Logopedia consistía en la rehabilitación del lenguaje, ya sea de forma oral o escrita para lo que el espejo mural, el magnetófono, los libros de cuentos “sin texto”, las marionetas, las láminas y los “puzles” eran instrumentos muy valiosos al servicio del profesor/a y del niño/a. Se calcula que un 75% del total de niños atendidos por este departamento correspondía a trastornos del lenguaje oral (dislalias, disartrias, etc.) el resto a trastornos del lenguaje escrito (dislexias). Según las estadísticas recibían tratamiento logopedico más de 60 niños diariamente.
Ortóptica. 
En cuanto a la Ortóptica: Rehabilitación del estrabismo, también era de nueva creación en el Sanatorio Marítimo. Al frente de Este Departamento estaba el oftalmólogo gijonés Dr. D. José María Mesa Galarreta, con sus auxiliares Stas. Marcela, Marlene y María del Mar y Marian.
Ortóptica. Un funcionamiento normal de los dos ojos, así como una correcta visión binocular y estereoscópica, son los objetivos que intenta cubrir la rehabilitación del estrabismo realizada por este departamento del Sanatorio Marítimo. En España en estos años existían más de tres millones de casos, que presentaban estrabismos, es decir, falta de paralelismo ocular en los dos ojos), estimándose en dos millones los casos en que se constata la pérdida de visión en un ojo. Una vez realizado el correspondiente examen a todos cuantos acudían hasta la consulta en el Sanatorio Marítimo, el Dr. Mesa determinaba el tratamiento rehabilitador a seguir, tratamiento que en muchos casos, se podía realizar en su propio domicilio, siguiendo las pautas señaladas por el Dr. Mesa y en otros casos siguiendo el tratamiento en el Centro en el servicio de Oftalmología atendido por las señoritas Marián, Marcela, María del Mar y Marlene          .
“Podemos afirmar que El Sanatorio Marítimo en la actualidad está cumpliendo, con el pueblo asturiano, una labor social y asistencial francamente difícil de ser sustituida y que sus instalaciones tienen un planteamiento de funcionalidad muy bueno para afrontar dignamente los próximos años” en palabras  del H. Turrillo Rodríguez , Director-gerente del Sanatorio Marítimo, quien resumía de esta forma el presente y el futuro de una institución, que desde el año 1945 presta servicio, primero  como respuesta a la Poliomielitis y después como respuesta al área de la Educación Especial.
En la actualidad (finales de los años 80) El Sanatorio Marítimo dedicado a la Educación Especial, tenía sus servicios concertados con el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC).servicios, que se concretan en las Unidades o Módulos en los que 220 niños y jóvenes de toda Asturias de edades comprendidas entre los doce y veintiún años recibían clases de E. Especial Básica y Formación Profesional Adaptada y Formación Profesional Aprendizaje de Tareas.. Sesenta de estos alumnos en régimen de internado y el resto hasta completar los 220 en régimen de medio-pensionistas.
La rehabilitación, el otro área tradicional del Marítimo estaba concertada con el INSALUD aunque por este año los servicios de Logopedia y Ortóptica han desaparecido, dado, que según el Director del Marítimo el INSALUD no ha creído conveniente que continúen y el  presupuesto de la Institución no está en condiciones de afrontar los gastos que generan dichos servicios, aunque a partir de ya La Logopedia pasa a ser parte del concierto educativo. Decir también que en el Sanatorio Marítimo permanecía en funcionamiento un área de rehabilitación física de tipo ambulatorio, en concierto con La Seguridad Social año 1987. Ya hemos dicho en anteriores comentarios, que desde su fundación el año 1945 hasta el pasado año 1988 el Marítimo sufragaba sus gastos mediante donativos de particulares, de suscripciones populares del pueblo asturiano y de una subvención anual del Ayuntamiento de Gijón, pero el aumento de los gastos ha propiciado que la subvención municipal y muchos de los donativos particulares ya eran insuficientes para que el Marítimo cumpliera eficientemente su cometido, por lo que en estos años el Sanatorio Marítimo pasa a ser un Centro Concertado al cien por cien por el Ministerio de Educación y Ciencia en cuanto a la Educación Especial se refiere.

Se abre un nuevo capítulo en la historia del centro, pues después de nacer como respuesta a la necesidad de combatir la poliomielitis, enfermedad que en los años de la posguerra hacia verdaderos estragos en la población infantil de nuestra Asturias. Más tarde allá, por el año 1966 cambió su orientación, hacia el campo de la Educación Especial, dado que la poliomielitis, dejaba de ser un azote para la población infantil gracias a la evolución de la medicina y la Educación Espacial era el nuevo problema, que presentaba la población infantil asturiana.  La Orden Hospitalaria, siempre en vanguardia y dando respuesta a las necesidades actuales se convierte en institución pionera de la Educación Especial en Asturias y uno de los primeros centros españoles de esas características.
Gerardo Alonso Matías.

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